Como ya dije, soy un lector empedernido y los domingos toca leer el periódico, empezando por las páginas anaranjadas, las de economía. Así que me he propuesto dedicar una entrada los lunes a algún tema económico que me haya llamado la atención.
Ayer me encontré con un artículo que hablaba sobre la situación en Italia y un concepto nuevo para mí: El síndrome de la cuarta semana
Se refiere a las dificultades para llegar a fin de mes, una vez que se ha acabado el cada vez más escaso salario y hay que hacer piruetas para llegar a fin de mes. Incluso he leído en alguna parte que este efecto se traslada ya a la tercera semana.
Puede que lo único que hayan hecho haya sido ponerle nombre a un fenómeno que se extiende como una mancha de aceite y en mayor o menor medida nos afecta a todos: Los salarios reales disminuyen mientras los precios (mucho más reales) aumentan, aunque los IPCs digan otra cosa.
Para saber más, artículo en El País
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